Los cuchillos Laguiole y su leyenda

Pequeña introducción

Con una historia de más de 150 años, los cuchillos Laguiole están impregnados de leyendas de la época. Una breve recopilación: Como cualquier objeto famoso, el Laguiole ha sido objeto de diversas leyendas sobre su origen y génesis. Todas tienen en común el hecho de ser pura fantasía, ya que el origen del cuchillo Laguiole es perfectamente conocido. La abeja en el mango: Según la leyenda local, se trata del sello imperial de Napoleón I, otorgado por el emperador a la ciudad de Laguiole en reconocimiento a la valentía en la batalla de los hombres originarios del pueblo.

¿Solo hay una abeja representada en el resorte?

En referencia a los antiguos cuchillos Laguiole de 100 a 150 años de antigüedad, la abeja no es el único motivo visible en el resorte de los Laguiole. Una cara humana, un trébol de cuatro hojas (símbolo de buena suerte), una concha de vieira (en referencia al Camino de Santiago que atraviesa el Aubrac), una abeja lisa... Cada uno tiene su interpretación.

¿Por qué un cuchillo Laguiole se vende y no se regala? Esto se debe a la pura superstición. Existe una costumbre según la cual no se debe regalar objetos cortantes para no cortar la amistad o el amor entre la persona que regala el cuchillo y la que lo recibe. Para evitar el mal augurio, o por simple tradición, se "recomienda" a la persona que recibe el cuchillo como regalo que entregue una moneda simbólica para crear un intercambio con quien regaló el cuchillo.

El auténtico cuchillo artesanal: aquí